
Aquí, los paganos incultos corren con agitados, mientras los creyentes temerosos piden perdón y clemencia. Pero existen otros que saben lo que pasa y esos son los silenciados.
Las estampidas de personas que gritan y sucumben al miedo sobrepasan todo pronostico de desquiciados científicos ambisiosos. Las estrellas se multiplican en el oscuro cielo, alabada sea la luna llena que nos dota de luz ante semejante caos.
Aquí, cae el llamado avance tecnològico. Aquí, ya nada más quedan los simientos de una vida pasada derrumbada entre lagrimas y sangre. Ya nada es como fue hace dos horas atrás. Las personas no quieren dormir. Les aterra enfrentarse nuevamente al caos.
Muchos no saben de sus amados, muchos aun lloran desconsolados. Lloran a sus hijos, hermanos, esposos, padres, familiares y amigos. En sus mentes solo queda lugar para el llanto y el dolor.
Con el crepúsculo, llega un destellos de esperanza, la cual se desmorona al ver los resulatdos de la tragedia. Agua en las montañas, casas que ocupan el lugar de los barcos en la bahía y barcos que ocupan un lugar privilegiado en los parques cuan monumentos dignos de admirar. Peces muertos ocupan el lugar de las macotas que algun día jugaron en los jardines de sus dueños. Jardines que ahora son sólo el cementerios de hogares.
Las lagrimas nuevamente amenazan con salir desbordadas por los ojos de quienes ven una vida derrumbada frente a ellos.
Yo. Yo sólo puedo relatar lo que veo en otros. En estos momentos no quiero pensar ni crear posibles hipotesis sobre lo ocurrido. Mi mente es demasiado fugaz y pensaría en cosas que me aterran. Sé que estoy bien y los seres que amo también, eso me consuela. Pero no quiero pensar en un futuro... por eso no quiero seguir escribiendo... porque tarde o temprano terminaría pensando...
Photo: Fear by kefirux.-DeviantArt
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