Heme aquí, concretando una decisión que nació hace mucho y hoy por fin llegó el día en que ya no puedo arrepentirme de ella.
Me he convertido en un padre sustituto, o más bien en el padre de un niño, el cual carece de este amor, por lo menos como yo veo que se debe recibir de parte de un padre. Y resulta gracioso y algo desconcertante el hecho de que ese niño fuese el hijo de mi hermano, resulta que por sus venas corre mi sangre o por lo menos algo parecida, y soy su padrino ¿En qué me he metido? Es la decisión que se me hizo más fácil de aceptar, pero creo la más difícil de cumplir, es una responsabilidad demasiado grande después de todo como ya lo he dicho, es un hijo, el primero, quizás no mi primogénito, pero su madre me eligió entre tantos más que pudo haber elegido para ser alguien especial para él, y lo agradezco y pienso en que lo que viene de aquí para e futuro, no se me hará nada de fácil, por que pretendo ser un padre para mi sobrino y ahijado, por que, a lo largo de mi vida, sé lo que se siente tener tanto un padre como un padrino ausente, por que no quiero que alguien especial sufra lo mismo que yo, que si bien comparado con otras perdona puede no ser la gran cosa, son cosas que me han hecho crecer como personas y no de mala manera (no es que me elogie solo sé quien y lo que soy).
Aquí a mi lado mi ahijado, cada día más querido y lo que viene de aquí en adelante solo fuerza y ánimos para una nueva responsabilidad que he decidido tomar, por que lo he decidido, por que el amor no es algo que salga de la nada, es algo que se decide sentir, es aquí donde nace, en la decisión de sentirlo, y esta vez decidí amar como padre...
1 comentario:
¡Qué lindo lo que dices! Espero que sea un camino que te llene tanto a ti como a tu hijo n.n
Te deseo la mejor de las suertes en esto y te felicito, tienes un corazón de oro =*
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